¿Qué opinan de éste pequeño relato que escribí?

Una madre y su hija pequeña están sentadas una frente a la otra en una mesa, iluminadas sólo por una lámpara. La niña está ensimismada, dibujando en una pequeña libreta con crayones, los cuales se esparcen por toda la mesa, desordenados. El silencio inunda la habitación, apenas interrumpido por el siseo de los trazos de la niña. La madre, tan sólo observa a su hija, reflexiva, cuando como un susurro llega a su mente la frase “somos como estrellas” y la niña se desvanece, junto con el cuadernillo y los crayones, quedando la madre sola, perdida en sus memorias de una niña que dejó de existir hace mucho tiempo.